7 Octubre 2009
Juan y yo te conocimos en la misma cama y al mismo tiempo. No sé si éramos tres o había alguien más por allí, no recuerdo aquella primera vez.
Me estuviste llamando durante un tiempo, querías repetir no sé qué. Me hablabas de cosas que no entendía, te reías y me preguntabas otras sin ni siquiera esperar mi respuesta. Me recordabas a la amiga que nos presentó, que no paraba de hablar sin decir nada. He de reconocer que cuando te desnudabas callabas, eso me convencía para quedarme, pero después me iba rápido, no quería oír de nuevo lo mismo de siempre.
A Juan le ocurría igual contigo, él también se iba rápido.
2 comentarios:
-No fue San Juan de la Cruz ese que dijo, 'un no se qué que dueda balbuciendo'.
-Eh, tú niña, no mezcles a la mística con la orgiástica.
(Ahora vendrá el pespunte del Peletero)
Que queda.
Corrijo errata.
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